PORTADA  /  DESTACADOS  /  APERTURA  /  ACTUALIDAD  /  ACTUALIDAD CEN  /  PREVENCIĶN   
 Relacionada
El seminario de "Gestión emocional" de CEN se centra en las técnicas de negociación
El seminario de "Gestión emocional", que organiza la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN), abordó, el pasado miércoles 16 de octubre, distintas técnicas de negociación. La sesión corrió a cargo de la consultora de Carbonell Formación, Silvia García.

 Actualidad CEN 
 RSS ACTUALIDAD CEN
Casos prácticos de negociación
"El componente emocional siempre está presente en el entorno de trabajo"
Juan José Beunza, director del Departamento de Ciencias Clínicas de la Universidad Europea de Madrid
Entre los años 2008 y 2009, France Telecom, una compañía de más de 100.000 trabajadores, registró decenas de suicidios entre sus empleados. Tal fue la conmoción por estos hechos, que el propio Gobierno francés elaboró un estudio, en el que se concluyó que, además de una mala política de Recursos Humanos, los trabajadores sufrían falta de reconocimiento y no se sentían valorados en la organización.





Técnicas de negociaciķn
“Debemos entender a los demás para solucionar nuestros intereses”
Juan José Beunza
 Descargar fichero relacionado Estudio Global de la Fuerza Laboral 2012
Towers Watson

 Descargar vídeo Juan José Beunzai

Éste fue uno de los casos que relató el director del Departamento de Ciencias Clínicas de la Universidad Europea de Madrid, Juan José Beunza, en la charla que impartió, el pasado miércoles, 23 de octubre, dentro del ciclo de gestión emocional que organiza la Confederación de Empresarios de Navarra. Éste aseguró que “el comportamiento emocional siempre está presente en el entorno de trabajo”, y eso hay que tenerlo en cuenta en la solución de problemas que puedan darse en la empresa. Particularmente, en la resolución de conflictos y en la negociación.

Así, Beunza dio algunas pautas para entender emociones. Para ello, se refirió a la Escuela de Harvard, que argumenta que detrás de las emociones se encuentran intereses, que, en el entorno profesional, pueden resumirse en cinco: valoración (que el trabajador se sienta valorado), “de enemigo a colega” (que el trabajador no sienta que le tratan como un oponente), que el profesional tenga autonomía, que se respete su status, así como que se reconozca su rol.

“¡Cuántos profesionales tenemos a nuestro alrededor, que son buenos y no lo saben!”, exclamó Beunza, que explicó, “si a un profesional se le respeta en el trabajo, eso le genera emociones positivas”. En cambio, de lo contrario, si no está valorado, las emociones negativas van generándole una sensación que comienza con una sensación de incomodidad, luego se convierte en agobio y termina estallando en pánico e incluso ira.

“Para valorar a alguien hay que saber escuchar”, con una actitud abierta y sin prejuicios, tal y como señaló Beunza. Eso conlleva saber “practicar el silencio”: “aunque te incomode el silencio, puede que tu interlocutor se sienta cómodo con él”, subrayó el experto. Éste también recomendó hacer preguntas abiertas para que la otra persona se sienta cómoda y nos cuenten su visión, y añadió: “muchas veces no pedimos opiniones, pero os sorprendería saber la cantidad de problemas que podemos resolver escuchándolas”.

Sólo un tercio de los trabajadores está altamente comprometido con su empresa

De hecho, poco más de un tercio de los trabajadores (el 35%) está altamente comprometido con su empresa. Un hecho especialmente perturbador dado que existe una vinculación fuerte entre altos niveles de compromiso sostenido y los resultados financieros de las compañías.

Ésta es una de las conclusiones del Estudio Global de la Fuerza Laboral 2012, editado por la consultora Towers Watson, que toma como referencia 50 compañías globales y que demuestra que aquellas empresas con una fuerza laboral con un compromiso sustentable alto tenían márgenes anuales tres veces superiores a aquellas con una fuerza laboral no comprometida. Sin embargo, el estudio también advierte de que “el compromiso es una cosa frágil, especialmente en una época en donde existe mucha presión tanto sobre los empresarios como sobre los empleados”.

Concretamente, el informe analiza estos tres factores:

Compromiso tradicional: disposición de los empleados de esforzarse más (por voluntad propia) en el trabajo.

Estar habilitado: contar con herramientas y apoyo (típicamente por medio de supervisores directos) para hacer su trabajo eficazmente.

Energía: el contar con un ambiente laboral que activamente apoya el bienestar físico, emocional e interpersonal.

Así, estos factores dieron como resultado los siguientes perfiles de trabajadores:

Altamente comprometidos (un 35%): empleados con calificaciones altas en los tres  elementos del compromiso sustentable.

Sin soporte (22%): tradicionalmente se sienten comprometidos pero sin estar habilitados o con la energía para un compromiso total.

Desapegados (17%): siente estar habilitados y/o con energía pero sin un sentido de compromiso tradicional.

No comprometidos (26%): empleados con calificaciones menos favorables en los tres aspectos del compromiso sustentable.

Imprimir noticia