“El PP y el PSOE deben hacer un esfuerzo para el consenso” (Juan Rosell, en entrevista a El Mundo, 1 de diciembre)

Así titulaba el diario El Mundo la entrevista al presidente de CEOE, Juan Rosell, que se presenta a la reelección al cargo en las elecciones del próximo 17 de diciembre. En su balance de mandato, Rosell afirma que “si alguien ve la CEOE hace cuatro años con datos objetivos, se han dado pasos de gigante. Los presupuestos se discutían en menos de tres minutos, mientras que ahora están la página web, y nos hemos dotado de un código ético muy importante. Son tiempos de regeneración, de transparencia y de ejemplaridad”.

En cambio, preguntado por las afirmaciones del presidente de CEPYME (y adversario en el proceso electoral), Antonio Garamendi, acerca de que dicho código ético “es solo estético”, Rosell contesta que “si Garamendi piensa eso lo que tenía que haber hecho es dimitir de la Comisión de Régimen Interno, de la cual era miembro. Lo que no se puede hacer es no hablar ni en la Comisión ni en el Comité Ejecutivo y ahora decir cosas absolutamente fuera de lugar. Su actitud es un desprecio para todos los que hemos estado en el Comité Ejecutivo”.

El presidente de CEOE también se refiere al contexto actual de negociación colectiva, informando de que, en cuanto a subidas salariales, “estamos firmando el 0,6% en este momento y tampoco creo que vaya a haber grandes cambios”. También advierte de que “todavía hay empresas con pérdidas. En 2012, solo había un 40% de empresas que ganaban dinero”. 

Al día siguiente, el diario Expansión también avanzaba algunas propuestas de las que Rosell incluye en su programa electoral, reunido en el documento CEOE 2015-2018: Futuro y propuestas concretas, como la petición a los sindicatos de un aumento de las horas extraordinarias y mayor implantación de los salarios flexibles –variables- en las empresas. Por otra parte, este mismo diario publicaba ayer que, en su programa, Garamendi pide un “despido más barato y una ley de huelga”. Según el diario económico, el presidente de CEPYME, sostiene que “la reducción del coste del despido individual es imprescindible para tener una economía competitiva”. Respecto a la segunda demanda, Garamendi considera que “es necesaria la regulación del derecho de huelga basada en la libertad y la voluntariedad”.

“Compromiso social obligado” (La Razón, 4 de diciembre)

El editorial de La Razón se refería así a la prestación para desempleados de larga duración planteada por el Gobierno a los agentes sociales. Según publicaba ayer jueves este diario, “hay que destacar el espíritu de acuerdo con el que se ha abordado un proceso complejo, cuyos condicionantes no pueden reducirse exclusivamente a la disponibilidad presupuestaria, sino que implican consideraciones de carácter funcional e, incluso, estratégico”. Sin embargo, también advierte de que “nos equivocaríamos todos si estas ayudas no se complementaran con medidas que faciliten la incorporación al mercado laboral de los colectivos desfavorecidos. Empezando por el modelo de formación, cuyos multimillonarios fondos no parecen haber rendido los réditos que se esperaban”, según este editorial.

“Recetas opuestas para bajar el paro” (El País, 1 de diciembre)

El pasado lunes, el diario El País publicaba un reportaje que recogía las valoraciones de los ministros de Trabajo de los últimos quince años, aunque también se hacía eco de las palabras de la actual secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, para quien “hemos hecho mucho para que el paso del desempleo al empleo sea lo más rápido posible. En políticas activas hemos firmado el primer contrato con entidades privadas de colocación, hemos lanzado un portal de empleo en el que se alojan 100.000 ofertas de trabajo, la estrategia de emprendimiento, la garantía de empleo juvenil… y todo en un contexto complicado”.

Sin embargo, no comparte este avance el ex ministro y actual diputado del PSOE, Jesús Caldera, que afirma que “lo mejor es una política anticíclica, no procíclica como defiende el Gobierno. Se necesitan inversiones y un gran programa de recualificación profesional que España no puede acometer sin ayuda europea”. “Hay que impulsar las políticas activas de empleo, que se han reducido dos tercios respecto a los magros presupuestos que había. Actualmente, de cada 100 euros gastados, al desempleado de larga duración apenas si llega uno y él debería ser el primer beneficiado de las mismas”, agrega Caldera. Por su parte, el titular de Trabajo “más efímero” de los últimos tres lustros, Manuel Pimentel, aboga por avanzar en la cultura de la flexibilidad a través de los convenios colectivos y por reducir las cotizaciones sociales para situarlas en la media europea.

“Un noviembre francamente esperanzador en empleo” (Iñigo Sagardoy de Simón, en Expansión, 3 de diciembre)

Este era el título del artículo de opinión publicado, el miércoles, en el diario Expansión, por el presidente de Sagardoy Abogados, Iñigo Sagardoy de Simón, en el que también defiende la flexibilidad en las relaciones laborales. El autor afirmaba que la reforma laboral que aprobó el Gobierno en 2012 “ha puesto en valor un deseo de cualquier regulación moderna del mercado de trabajo: propiciar de forma más ágil y dinámica la transformación de la empresa en un entorno cambiante a través de la flexibilidad, frente a una cultura anterior dónde el despido era la primera elección empresarial porque no disponía de otros instrumentos legales”.

“España, récord en caída inmigratoria” (El Mundo, 2 de diciembre)

Según El Mundo, España es el país de la OCDE donde más baja la llegada de extranjeros durante la crisis. El medio se hace eco del International Migration Outlook 2014, de la OCDE, que recalca que, en apenas seis años, España ha bajado del segundo al octavo puesto en la lista de los principales receptores de inmigrantes en términos absolutos. Por el contrario, Alemania, que partía de una realidad muy parecida a la que ahora tiene España, ha escalado hasta convertirse en el segundo destino migratorio por detrás de Estados Unidos. “De lo que no cabe duda es que, en un tiempo récord, hemos pasado de tierra de acogida a lugar que los foráneos ya no quieren venir. Los expertos no conocen otro caso donde, en tan poco tiempo, la llegada de inmigrantes haya experimentado un incremento tan espectacular seguido de esta inmediata caída”, refleja el diario.

Del mismo modo, el número de españoles que se han marchado a otros países se ha triplicado en un lustro. El reportaje también incide en que la nacionalidad de residentes más numerosa en España es la marroquí, que ha pasado de 850.000 a 350.000 personas en ese periodo.

“Báñez saca 8.000 millones de la ‘hucha’ de pensiones para la extra de Navidad” (Expansión, 2 de diciembre)

El pasado lunes, el Fondo de Reserva de la Seguridad Social para asegurar el pago de las pensiones retrocedió a niveles inferiores a 2007, antes de la crisis económica, con 42.675 millones de euros. Es decir, el 4,07% del PIB. En aquel año, la cuantía de la también como hucha de las pensiones fue de 45.716 millones de euros, tal y como informaba el martes Expansión.

“La industria farmacéutica vuelve a crecer tras el bache de la crisis” (El Periódico, 29 de noviembre)

“El sector farmacéutico quiere pasar página. Después de lamentarse durante los años pasados de los efectos de los medicamentazos aprobados por el Gobierno central y los autonómicos sobre el empleo y la facturación de las empresas, la patronal Farmaindustria destaca ahora que prevé acabar el año con un crecimiento de los ingresos alrededor del 2% y una cifra similar para el 2015”, según El Periódico, que también destaca que los datos oficiales de la Seguridad Social muestran ya un repunte del empleo en las empresas dedicadas a la fabricación de medicinas, al pasar de unos 42.000 empleados en el 2013 a 43.415 en octubre pasado. Además, “los laboratorios de capital español, más expuestos al impacto de los recortes de gasto público, han conseguido ya superar en un simbólico 1% la facturación que tenían en el 2009, cuando empezó el desplome”.